Cómo identificar las aftas, causas y tratamiento

Las aftas, denominadas médicamente úlceras aftosas, son lesiones diminutas y superficiales que se manifiestan dentro de la cavidad oral, a menudo en la cara interna de las mejillas, los labios, el paladar o la parte superior de la garganta. Estas úlceras son notablemente prevalentes, y afectan aproximadamente al 20% de la población mundial.

Etiología de las aftas

Aunque la etiología precisa de las aftas sigue siendo elusiva, se han identificado varios factores que pueden precipitar su aparición:

• Estrés psicológico: La tensión emocional puede comprometer el sistema inmunitario, facilitando potencialmente el desarrollo de estas úlceras.

• Influencias dietéticas: El consumo de alimentos ácidos o picantes podría exacerbar la mucosa oral, provocando ulceración.

• Deficiencias nutricionales: Los niveles inadecuados de vitaminas y minerales esenciales, como la vitamina B12, el hierro y el ácido fólico, se han relacionado con una mayor susceptibilidad.

• Condiciones de salud: Ciertas afecciones sistémicas pueden predisponer a las personas a padecer úlceras orales recurrentes.

• Productos de higiene bucal: La presencia de lauril sulfato sódico (SLS) en algunas pastas dentífricas se ha asociado a la aparición de aftas.

Identificar las aftas

Distinguir las aftas de otras lesiones orales, como el herpes labial, es crucial para un tratamiento adecuado. Las aftas se caracterizan por:

• Aspecto: Úlceras blanquecinas o amarillentas con un borde rojo, localizadas en el interior de la boca.

• Sensación prodrómica: Sensación de quemazón u hormigueo que precede a la aparición de la úlcera.

• Síntomas sistémicos: Ocasionalmente acompañados de fiebre o fatiga.

Las referencias visuales pueden ser decisivas para la identificación. Los sitios web médicos, incluido TheraBreath, ofrecen amplias galerías de imágenes de aftas para compararlas.

Enfoques terapéuticos

Las estrategias de tratamiento de las aftas abarcan tanto el tratamiento como la prevención:

• Agentes tópicos: Las pomadas, geles y enjuagues bucales de venta libre pueden aliviar las molestias y acelerar la curación.

• Medicamentos recetados: Para los casos graves o persistentes, los profesionales sanitarios pueden prescribir tratamientos específicos.

• Medidas preventivas: Utilizar productos de cuidado bucal sin SLS, como la pasta dentífrica y el enjuague bucal TheraBreath Plus, puede reducir la recurrencia.